Seguramente no tenían conciencia del legado que tan increibles obras de arte, dejaban para la posteridad. Han dejado de ser meros objetos para transformarse en un camino seguro a un pasado muy cercano.
Nostagia de lo que no vivimos, aveces, el encanto de nuestras prendas, más seguramente, el soporte de muchos sueños que se reviven en el cine, las novelas, revistas, blogs y alguna que otra persona que los colecciona.
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