Uno imagina más de dos manos dándole forma a la dulzura, textura y gustito a fresas, vainilla, canela o miel. (Cuando el amor se desliza por los dedos hasta el paladar de los que amamos)
Dulces, muy dulces princesas dejando su huella en una memoria insobornable. La felicidad, también puede tener sabor...
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